
Érase quesera……….
Una niña llamada Judith, que no quería ir a dormir pronto, le gustaba ver los dibujos hasta altas horas y no hacia nunca caso a su mama, cada día al levantarse para ir al colegio tenia mucho sueño y lloraba porque quería dormir.
Una noche ya desesperada su mama lloraba delante de la ventana, una estrella que la miraba se compadeció de ella y bajo desde su cielo para preguntarla, la mama la explico su problema a lo que la estrella contesto; No te preocupes mandare al señor de arena para que tire su arena en los ojitos de Judith, así ella podrá descansar y se levantara contenta para ir al colegio.
Al llegar la noche su mama acostó a Judith la dio un besito y la arropó como todas las noches, ¡ pero aquella noche seria diferente!, el señor de arena…. Visitaría a Judith.
Una niña llamada Judith, que no quería ir a dormir pronto, le gustaba ver los dibujos hasta altas horas y no hacia nunca caso a su mama, cada día al levantarse para ir al colegio tenia mucho sueño y lloraba porque quería dormir.
Una noche ya desesperada su mama lloraba delante de la ventana, una estrella que la miraba se compadeció de ella y bajo desde su cielo para preguntarla, la mama la explico su problema a lo que la estrella contesto; No te preocupes mandare al señor de arena para que tire su arena en los ojitos de Judith, así ella podrá descansar y se levantara contenta para ir al colegio.
Al llegar la noche su mama acostó a Judith la dio un besito y la arropó como todas las noches, ¡ pero aquella noche seria diferente!, el señor de arena…. Visitaría a Judith.
Justo cuando la niña quiso levantarse para encender la televisión , apareció el señor de arena, tirando arena a los ojos de Judith, lo que la produjo picores y un sueño terrible.

Aquel señor la explico al oído que, los niños que no duermen a su hora no crecen se quedan muy pequeñitos tan pequeñitos que se convierten en granitos de arena.
1 comentario:
Me ha encantado, es precioso.
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