Disfruta de pequeños placeres que son gratis y están al alcance de todos.
Solo necesitamos focalizarlos. Un paseo por el campo, la playa, una puesta de sol, un banco en el parque, una cañita en una terraza, etc... Cada cosa bella que nos rodea, cada gesto que nos alegra la vida es irrepetible.
Hay que ser muy consciente, saborearlo y atraparlo en nuestra memoria.
Tengo cáncer de mama. Me lo diagnosticaron hace 3 meses con 42 años y fue una bomba emocional en toda regla. De hecho, es pasado este tiempo cuando siento que soy capaz de empezar a recoger de aquí y de allá los trocitos de estructura de vida que la onda expansiva ha desparramado por los aires.
Una confesión estrepitosa y demoledora cuando viene de alguien a quien conoces o amas.
Es fundamental no sentirnos culpables, que el mal humor no nos amargue y aprovechemos cada oportunidad, cada momento, para disfrutar de los miles de pequeños placeres que la vida nos regala, que tenemos al alcance de nuestra mano y ni siquiera percibimos en nuestra continua carrera de la vida.
Dedicado a todas las mujeres anónimas que luchan por vivir un día más.
alicia alvarez
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